NOCHE DE LOBOS.-

   La noche era invernal, llovia, hacia frio, viento, muy oscura y mas por aquél camino de O Rente que une Queizán con S.M. de Pedrafita en el consello de o Corgo. Viriato y su hijo Santiago de 10 años habian ido a llevar una vaca llamada pastora al toro que habia en casa de Ferreiro de Queizán. Se habian retrasado un poco por haber estado visitando a un pariente en dicho pueblo.  Cuando regresaban sobre la media  noche faltándoles solamente unos 1.350 metros para llegar a su casa de Pedrafita, y al cruzar el regato llamado de As Labandeiras por un pequeño puente y camino estrecho y muy oscuro, la pastora se les puso muy inquieta y,  conocedor Viriato de la inquietud del animal, cogió a su hijo de la mano y le dijo, tenemos el lobo muy cerca, y efectivamente vieron como a unos 20 metros delante de ellos habia un lobo grande  y asimismo detrás a un misma distancia habia otro y que poco a poco se les iban acercando y arrinconándoles, tomando Viriato la decisión de soltar la vaca que la tenia amarrada por una cuerda y salvarse él y su hijo, ya que si intentaban derfenderla podian ser atacados por la fieras; pero en ese momento de soltar dicha cuerda  vieron como unos destellos de luz los iluminaban fuertemente los cuales salian del tragalud de la capilla de la Virgen de las Virtudes que estaba próxima a unos trescientos metros, cuyo hecho hizo desaparecer a los lobos y ellos proseguir su camino para Pedrafita, pero que al pasar a la altura de dicha capilla los reflejos de luz tambien desapareciron, pensando entre ambos que todo ello habia sido obra de la Virgen de las Virtudes donde Santiago era monaguillo. Llegaron a casa y despues de guardar a la pastora en su establo le dijo el hijo al padre, papa, yo con el miedo me hice caca en los pantalones, contestándole el padre, tranquilo Santi, vamos a cambiarnos de ropa los dos que esto huele mal. Es un relato real o aproximado, ocurrido en el  año 1954.- un saludo del autor, Xose P.V.