TERRAS DO FERRADAL.-Ponte Ferradal,rio chamoso, y el perro yaqui.-

Se encuentran situadas a las orillas del rio chamoso entre las aldeas de Pedrafita y Adai y que dichas aldeas aparte de comunicarse por la carretera p-1602, por el puente de as aceñas del rio chamoso tambien se puede ir por un camino vecinal que se cruza dicho rio por el puente de ferradal.-

Bién, pues dichas tierras tienen su historia según cuentas algunos vecinos/as ya fallecidos; parece ser que al cruzar el referido puente en cualquiera de las direcciones que fueses tanto si ibas de Pedrafita o si venias de Adai, se escuchaban unas voces humanas que mezcladas con el sonido de las aguas al chocar con los pilares del puente resultaban escandalosas y normalmente salias corriendo del lugar, pero  solamente ocurria los viernes y sábados por las noches. Esto se fué comentando entre los vecinos de ambos pueblos los cuales llegaron a la conclusión de investigar los hechos, así que un viernes por la noche varios de ellos unos con escopetas y otros con hachas etc. se personaron a media noche en el lugar, iban diez en total, y  decidieron cruzar dicha ponte en dirección a Pedrafita lo cual hicieron sin ninguna dificultad y sin observar nada  anormal; que despues de observar un rato la zona decidieron regresar a sus casas, unos para Adai y los otros para Pedrafita. Los de Adai al llegar a la altura del recinto ferial donde todos los dias trece de cada mes se celebra la feria del 13 uno de ellos dice; oye que vamos solamente cuatro falta Eustaquio el cazador, quedándose todos esperando un rato al lado del cementerio que hay próximo al campo de feria pero al ver que no aparecia decidieron volver con  dirección al puente por si le habia ocurrido algo, pero la sorpresa fué cuando casi llegando al lugar sintieron unos gritos, ! estoy aquí, estoy aquí ¡ pudiendo observar que en uno de los pinos que hay en las inmediaciones se encontraba Eustaquio  colgado por las dos piernas de una de las ramas del arbusto con la cabeza hacia bajo a unos dos metros del suelo. Los cuatro vecinos se quedaron atónicos, descolgándo ya que las piernas a la altura del tobillo las tenia atadas a la rama del árbol con unas fuertes espadañas y pergúntándole que le habia pasado dijo no acordarse de nada y la escopeta de caza que llevaba se encontraba en el suelo  a unos metros partida en dos  a la altura de los cañones y Eustaquio asustadísimo, lo único que les manifestó es que al ir andando el último le cogió alguien por el cuello tapándole la boca quedándose inconsciente recuperándose cuando ya estaba colgado del pino sin poder explicar nada mas. Los cinco de Adai decidieron regresar a sus casas con sus comentarios sobre el caso aduciendo que podia ser cosa de meigas ya que se comentaba que en dichas tierras de Ferradal en tiempos remotos y debajo del puente mediaval de Galiñeiros ya en tierras conlindantes del picato habia habitado una famosa meiga a orillas del Chamoso.-

De momento la cosa quedó así, pero en Pedrafita habia un tal Pepe "el larpeiro" le llamaban así porque se comia el solo un lacón con grelos y se bebia tres litros de vino de una asentada, era un hombre de un metro y ochenta de altura y de unos cien kilos de peso, dicen que muy buena persona, no tenia miedo a nada ni a nadie, parece ser que en una ocasión desarmó en la feria de Adai a dos parejas de la guardia civil, eso dicen; bien pues el sr. larpeiro se enteró de lo sucedido en a ponte de ferradal, por lo que decidió ir por su cuenta hacerle una visita asi que un sábado por la noche se dirigió al lugar, él lo conocia bien ya qye tenia un prado en las proximidades y habia cruzado la ´famosa ponte muchas veces pero nunca de noche. Llegó Pepe sobre las 23,45 horas al lugar acompañado de un cuchillo de matar los cerdos y una hoz de mango largo, pero unos metros antes de llegar a dicha ponte notó unos pasos a su espalda y que alguien le seguia y si él se paraba los pasos tambien aunque como la noche era oscura no podia ver a nadie detrás por lo que decidió seguir hasta la orilla del rio antes de cruzarlo por el puente y volviéndose hacia tras con la hoz en la mano dijo; ! son Pepe o larpeiro ea mismo que larpo un lacón de cinco kilos tamen trago a quen seña¡ en esto hubo un silencio y al poco rato escuchó una voz deformada que le dijo ! atí non che quero facer daño eres unha boa persona márchate para a casa¡ y Pepe con todo lo machote que era le obedeció pensando que seria tambien la meiga del picato a algún familiar, pero cuando llegó a la mitad del camino entre ferradal y Pedrafita que hay sobre un km-.se le vino la voz que habia escuchado antes a la cabeza, se quedó parado, se sentó en una de las piedras de la pared que existe subiendo a mano derecha y dijo ! pero si esta voz la conozco yó¡ es la voz de un muiñeiro que tuvieron los de san martiño que le llamaban "el centeno" pero si este hombre que tendrá ahora unos 69 años se comentó que habia escapado del molino y habia muerto quemado haciendo el carbón de uz en montecubeiro, un pueblo del municipio de Castroverde a unos 20 km del lugar. Total que el sr. larpeiro indagó por medio de la G.Civil ya que tenia un  primo en o Cádavo que era cabo y efectivamente el que habia muerto quemado habia sido otra persona no el molinero.

La guardia civil hizo las correspondientes actuaciones para localizar al causante de los hechos, localizándole durmiendo en un pequeño pajar que habia en la parte trasera del molino donde el trabajó, y preguntándole porqué hacia esto, les manifestó; que no podia vivir sin visitar el molino y que aprovechaba lo del puente para divertirse ya que su alimento era el grano de centeno molido o crudo y agua del rio chamoso y que él no tenia ninguna otra familia y  hasta la fecha habia sido feliz así, que se habia marchado de trabajar en el molino porque una mujer de Adai se queria casar con él que en más de una ocasión habia intentado bajarle los pantalones y él no la queria porque era muy fea y mala por eso se marchó escondiéndose allí en su querido molino.- Y aquí  termina la historia del sr. Centeno y demás personajes; los de Adai cuando se enteraron se daban cabezazos contra la pared del cementerio, ya que lo conocian y les daba verguenza del miedo que cogieron en el puente y no menos los de Pedrafita.- Un saludo de J.P.Vila